viernes, 2 de octubre de 2015

Fruto de la noche

No me digáis porque, pero este árbol es uno de mis preferidos fotográficamente y en general. Su leña robusta y retorcida, su ramaje frondoso e intacto durante todo el año, no se, parece como si el tiempo dejaría cicatrices en sus duras cortezas aguantando a duras inclemencias del tiempo, tanto a las bajas temperaturas del invierno como al contrario a las elevadas del verano.

Siempre he admirado este tipo de árbol, así como a los viejos castaños, encinas, robles y tejos.
En Cantabria es muy difícil de encontrar un olivo salvaje, situándose siempre en fincas privadas donde a base de un capricho costoso se llegan a trasplantar como adorno en el jardín.
Este que os traigo fue en otra de las salidas que realicé en La Rioja (allí sobran) y es que el aceite que se produce con sus olivas es de muy alta calidad así como las aceitunas de encurtido, ¡deliciosas!.

Cerca de este, en un pueblo llamado Sojuela, hay un olivo centenario, si mal no recuerdo de más de 500 años del cual quería haberme llevado alguna foto.
Me lleve una decepción al localizarlo y verle completamente abandonado, con su enorme tronco tapado con demasiada maleza y nuevos brotes salidos de las raices, su frondoso ramaje sin cuidado ninguno. En resumidas cuentas......no me gustaba por que no se le podía sacar todo el detalle al tronco y encima la ubicación del mismo no dejaba hacer una compo y encuadre digno a tanta antigüedad , ya que estaba pegado a otros tres, por lo que me tuve que conformar con este en una zona limpia de vegetación y solitario.



LA FOTOGRAFÍA.

Este fue el resultado de otra salida con mi compañero riojano, Miguel.
Últimos instantes de la hora azul, con todavía algo de luz y con estrellas visibles.

La Iluminación fue realizada con una antorcha de led, colocada detrás del tronco y dando luz continua en el tiempo que duraría la toma, primeramente comprobada la intensidad con el tiempo y parámetros colocados en cámara. Eso por un lado.
La segunda iluminación fue realizada con otra antorcha, pero esta vez dirigiendo la luz desde la parte izq de la foto hacia la derecha, con muy poca intensidad para la parte delantera del olivo y el mismo.

Lástima que hiciera viento y se me moviera un poco el ramaje. Otro punto fue el enfoque que le realicé al tronco, por lo que toda la parte trasera sale un poco desenfocada, así como las estrellas, más gordas. Todo esto buscado. (menos las nubes que no me gustan nada donde están situadas).

Los datos de la toma que a mi siempre me gusta compartir son los siguientes:

focal 11 mm.
tiempo de exposición 30".
f 2.8.
Iso 400.

Espero que os guste. Muchas gracias y un saludo.


3 comentarios:

  1. Me parece como un sueño, ver el resultado, y acordarme que yo estaba allí mientras el maestro pintaba de luz, con ese giro de muñeca prodigioso.
    Allí es donde me percaté de lo cuidadoso y meticuloso que eres, lo cual me ratifica en que eres un gran pintor nocturno. Felicidades.

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  2. Muy buena Manu! me gusta mucho la transición de lucen entre la parte trasera del árbol y la delantera, con esas sombras sutiles, sin llegar a la oscuridad absoluta!!

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  3. Genial la luz Manu, me gusta como has jugado con las diagonales y lo bien que te han quedado las sombras.
    Un abrazo!!

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